La tarea de las relaciones públicas de la nueva gestión municipal de Esperanza

Por Franklin Onésimo Tavárez Sánchez, MAM/MAE

En Esperanza.-Quienes hacemos uso masivo de los medios de comunicación y permanecemos en la radio, televisión y multimedias más allá de los procesos electorales, somos aquellos que amamos este oficio y hemos creado una plataforma que nos hace incluso -aveces empeñar nuestros ingresos familiares-. para lograr la satisfacción de no depender del favor del político de turno, exclamando con satisfacción nuestra independencia, el prestigio y la quietud que dan los años.

Sin embargo, cuando un comunicador que maneja la imagen pública de un político que aspira a un puesto electivo decide accionar atropellando, criticando todo y ofendiendo a sus colegas en pro de sus intereses partidarios, se sirva con su dama en rol de opositor, pero olvida que si su representado fuese electo deberá entonces pasar el rol de defensor cuando tenga ante si la realidad de NECESIDADES ILIMITADAS y recursos LIMITADOS PARA SATISFACERLAS y entonces notará que no es lo mismo criticar que  resaltar.

Es justo ese papel el que le tocará a algunos hermanos de los medios, que en el reciente pasado electoral ofendieron hasta la saciedad a quienes disentimos de ellos, llegando incluso a sacar llamadas del aire, afectar innecesariamente la amistad o fabular, solo por el hecho de defender una idea, no sabiendo que las relaciones públicas consisten en difundir las bondades de tu marca, sin necesariamente opacar la del otro.

Ya el proceso electoral quedó atrás y agosto dieciseís se enseña, llegando al palacio municipal esperanceño las nuevas autoridades electas, las que por manejar fondos públicos habrán de dar cuentas por el manejo de estos y por ende, entender sus manejadores que en ese norte han de tender nexos, ahora no para criticar rabiosamente, SINO PARA TODO LO CONTRARIO.

Es justo desde la tranquilidad de alguien que logró quietud sin necesidad de ser parte de los pasados diez años de gestión municipal, que me atrevo a decir en voz alta, que el éxito o el fracaso de la nueva gestión que dirigirá la reformista Ana Jacqueline Peña en el cabildo esperanceño, dependerá en gran medida de a quienes designe para manejar su imagen pública hacia afuera y del librito que usen en su relación con los medios y con los restantes sectores de la sociedad.

Es que hacer comunicación para proyectar una marca, no funciona con el cuchillo en la boca, con el látigo en los dedos o con el odio en el accionar cotidiano, pues todos los plazos llegan y las gestiones institucionales públicas también requieren de buena imagen y si la nueva alcaldesa no tomara en cuenta buscar en su equipo de colaboradores a elementos maduros, capacitados, moderados, concertadores y desprovistos de odios, quizás pudiese inaugurar el acceso a un mandato y sepultar las posibilidades no volver a competir con posibilidades.

Los días vendrán y los clavos serán martillos y los Martillos clavos, siendo solo la diplomacia y la creación de enlaces la diferencia entre un cuatrenio similar al decenio que ahora agoniza o un espacio de holocaustos informativos, en una época de multiplicidad en los medios, donde nadie tiene la hegemonía de la audiencia absoluta y desde la grada AGUARDAMOS, los perfiles de los interlocutores que con nuestros fondos designará la máxima autoridad municipal de la ciudad, pues en ese cargo y no en tesoreros, jefes de departamentos o incumbentes diversos, radicará éxito o el fracaso de las ejecutorias por venir….DE ESTE TEMA SEGUIREMOS HABLANDO.

Nota:

El autor es manejador de medios y facilitador de comunicación y marketing

LOS ROSTROS A CONTINUACIóN NO NECESARIAMENTE RESPONDEN AL PERFIL DE OFENSORES, SINO, QUE EL RUMOR SEñALA QUE DE ENTRE ELLOS SERiAN ESCOGIDOS LOS VOCEROS POR SU AFINIDAD CON LA NUEVA GESTIóN.