En la víspera he visto con emociones encontradas una publicidad visual del dirigente político y hermano, César Augusto Matías, la cual ha sido amplificada por el ex -regidor y dirigente perredeísta Amauris Cabral Madera y el ex -perremeísta Héctor José Núñez, de reciente retorno al PRD.
Al observar la valla, en mi condición de mercadólogo y dirigente político he debido evaluarla por separado desde mis dos perfiles y a partir de ello, me animo a exteriorizar esas valoraciones.
Desde el rol de Mercadólogo:
Creo que los manejadores del productor Yayo buscan revivirle en la mente del conglomerado votante y al presentar su publicidad gráfica desprovista de símbolos partidarios, dejan abierta la posibilidad de que cualquier fuerza política lo asume -Incluyendo su antiguo P.R.M. y desde esa óptica es coherente que no lo hagan acompañar de simbologías.
Incluso, parece una apuesta vivaz y precoz a re-posicionarlo frente a legítimas y necesarias nuevas figuras que puedan surgir para suplantar la desgastada imagen del actual Senador Manuel de Jesús Guichardo Vargas y como para presentarse él como la antítesis a las aspiraciones de Angela Pozo, Johanny Guzmán u otros líderes que se perfilan como pre-candidatos al puesto de nuestro representante provincial ante la cámara alta.
Empero, la omisión de la simbología partidaria, también puede actuar en su contra, pues se arriesga a que nadie le asuma como una propuesta seria por no estar debidamente identificado, pero si lo que se busca es crear expectativas de cara a futuras negociaciones y buscar COMPENSACIONES o que lo impongan como OFERTA, entonces la jugada de sus interlocutores de Marketing es CORRECTA Y ATINADA.
Sin embargo, en mi conocido rol de dirigente político perredeísta,debo decir que:
Yayo yerra al dejar de lado las simbologías blancas, por cuanto habiendo bailado en la fiesta del PRM, besado al PRD, vuelto al PRM y finalmente candidateado por el PRD, César Augusto Matías (si piensa volver a aspirar por el PRD ) ha debido usar todos los símbolos blancos desde un principio, para lograr que se le asuma desde ya e incluso posicionarse frente a los necesarios contendores internos.
Es que habiendo logrado una baja votación en las elecciones pasadas y teniendo muchos los legítimos temores de que se nos vuelva a ir al P.R.M., Yayo debe colar su café claro, a menos que solo se esté poniendo donde el capitán lo vea y que no tenga reales intenciones de salir de su sepulcro y volver a ser una alternativa válida, pues sus méritos de AYER, nadie, ni siquiera quienes podemos contradecirle en algunos aspectos -PODRíAMOS REGATEáRSELOS.
…Pero este es un tema, al cual le he de dedicar otras entregas, debido a que el producto Matías es una realidad, que sin embargo no debe ser impuesta, sino ganarse cualquier nominación a fuerza de legitimarse con votos y no desde las altas instancias.